sábado, 23 de julio de 2011

Hasta que la muerte….


Era el día más feliz de su vida. María a sus veinticuatro años, había conseguido lo que tanto deseaba. El amor hacia Manuel era tan grande, sentía que serian felices para el resto de sus vidas. Su noviazgo había sido corto, pero sabía que era su príncipe azul. Su boda fue mucho mejor de lo que había soñado, en la catedral donde la bautizaron y recibió su primera comunión. El convite en unos famosos salones de su ciudad. Varios cientos de invitados les acompañaron en este momento tan importante.
Después de la celebración montaron en su coche, camino al aeropuerto. No se cambiaron era tarde para coger el vuelo, lo harían en la misma terminal. La velocidad era superior a lo permitido. Una patrulla de carretera les intercepto a tres kilómetros de su destino. Cuando los agentes vieron a la feliz pareja, les dejaron continuar. Ellos rieron por la buena suerte que habían tenido, el no cambiar sus vestidos resulto una gran idea. Una prueba de alcoholemia hubiese alterado sus planes, ya que sería positiva por mucho.
Manuel giro su cabeza hacia su bella esposa para besarla. Al volver sus ojos al frente había algo delante de ellos, quizás un animal. Viró bruscamente el volante hacia su derecha. María grito horrorizada, sus pensamientos se nublaron de repente. El coche voló fuera de la calzada sobre un pequeño bosque. Los  cuerpos salieron despedidos golpeando contra los arboles. El falleció en el acto con el cuello roto, ella minutos antes de llegar la ambulancia a unos cuantos metros. Su vestido de novia estaba completamente teñido de sangre, en el silencio de la noche.